Las casas prefabricadas son un concepto de vivienda que se extendió por los Estados Unidos y Canadá durante el último tramo del siglo XX. Posteriormente, llegaron a ser muy populares en Francia, Israel e Inglaterra. Pese a su popularidad en dichos países, las casas prefabricadas en España nunca han tenido ‘’buena fama’’, ya que se las has relacionado con el clásico prototipo de barracón con el fin de alojar a escolares de forma temporal o trabajadores del sector de la construcción.

Sin embargo, esta tendencia negativa se va disipando poco a poco en nuestro país y, en los últimos tres años, las demandas de presupuesto para la construcción de casas prefabricadas en España se han triplicado, según algunos datos del portal de reformas online ‘’Habitíssimo’’. Concretamente, según fuentes de este mismo portal, en el año 2015 se solicitaron 4 mil presupuestos frente a los 1.750 de los dos años anteriores.
Estas cifras son procedentes de más de 200 empresas del sector del inmobiliario prefabricado. La constitución de este tipo de casas es tan resistente y sólida como las tradicionales de ladrillo. De hecho, suele contar con materiales que las hacen más eficientes. El arquitecto del estudio ‘’Mapout’, Aritz González, afirma a Cadena SER que ‘’estas viviendas cumplen con toda la normativa existente y pueden destinarse a primera residencia’’.

El método de construcción consiste en la fabricación industrial de paneles de madera encolada y resistente a diferentes esfuerzos de carga. Hay empresas como HomeCenter, empresa del sector ubicada en Barcelona que construyen con otro tipo de materiales como el acero forjado.
Económicamente, también son muy rentables, ya que el precio por metro cuadrado en España se sitúa entre los 700 y los 900 metros, mientras que la construcción tradicional varía entre los 1.000 y los 1.400 euros, según datos del sector que cita ‘’Habitíssimo’’.